El había pedido el café, al concluir la cena, cuando vio al hombre de la mesa de la esquina del salón, despedirse de su acompañante con un beso. En ese momento fijo los ojos en ella, realmente era una mujer hermosa, su largo cabello se extendía sobre el top color coral, donde resaltaba más el color negro del mismo
Entre dudas, resolvió acercarse y hablarle. Con sorpresa lo acepto. Hablaron de la belleza del lugar, la excelente comida y bebidas que brindaban.
Salieron juntos, caminaron de la mano en la playa, cuando amanecía, fueron a la habitación de ella. Apenas pasada la puerta se abrazaron y fundieron en un beso. Colgada de sus hombros la llevo a la cama y tuvieron el más ardiente de los sexos.
Entre charla y caricias se durmieron abrazados. Disfrutaron juntos el desayuno. Debía irse a su propio cuarto, cambiarse, el plan era a tomar un cálido baño de mar.
-Señor desea algo más? – pregunto el mozo
Dejo la propina, no quedaban comensales en el restaurante
Lapislazuli
Me gusta hacer el amor no el sexo..no se a ellos. Me dejastes analizando la escena por unos minutos
ResponderEliminarMe quedo analizándolo.
ResponderEliminarAbrazos
Perfecto Lapislazuli, me he fundido entre la realidad y los pensamientos, sin darme cuenta, como el protagonista volviendo a la realidad justo cuando el camarero ha llegado.
ResponderEliminarUn abrazo!!!
Hola Lapislazuli.
ResponderEliminarVaya, por el final se ve que el señor quedó ensimismado y soñó despierto, la belleza lo envilvio en una nube de deseo y fantasía.
Me ausento, pero aunque no publique, pasare a visitar siempre que me sea posible.
Un abrazo.
Ambar
Un abrazo
Lapislazuli. Abrá sido un sueño por la fascinación del momento, que creyo realidad.
ResponderEliminarAbrazos.
Genial!!!
ResponderEliminarMe encanta esa fusión de sueño que despierta con una realidad
Pero, has narrado algo, que muchas veces pasa.En la cimiente de los sueños, hay siempre otra vida
Besosssss
La imaginación nos puede llevar hasta lugares insospechados o hacernos vivir momentos muy agradables, mientras no haya un inoportuno que nos haga volver a la realidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
JEJEJEJE. EXCELENTÍSIMOOOOOOOOOOOOOOOO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Soñar cuesta poco.
ResponderEliminarBesos hoy desde
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2014/08/cerezas-de-goji.html
Cuantas veces nos quedamos soñando en medio de una multitud…
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Cariños…
Nunca se sueña tanto como cuando se está despierto.
ResponderEliminarLo hermoso de soñar, verdad??????
ResponderEliminarQué importa lo despierte la realidad, si por un momento se sintió el más felíz de los hombres.
Un relato, super, pero super bueno.
Como siempre digo, cuando sueño, no me despierten please.
Besitos muchos, querida Lapislazuli
¡¡¡QUE BUENO!!
ResponderEliminarLa imaginación puede ser el puente para la más venturosa de las aventuras.
Me encantó.
mariarosa
La mejor de las vivencias curiosamente suele nacer de nuestra imaginación. Un precioso texto.
ResponderEliminarbesos
ja ja ja, demasiado bueno para ser verdad no? Un abrazo Lapislázuli!
ResponderEliminarDepende del beso inicial para juzgar la historia, podría haber mucho más allá del relato.
ResponderEliminarUn beso dulce y buen finde.
Entiendo al camarero: es que hay que retirar el buffet del desayuno para comenzar con el almuerzo!
ResponderEliminarPaja mental de la buena xD!!!!
ResponderEliminarUn encuentro inolvidable...
ResponderEliminarYo quiero ir a ese restaurante y soñar así
ResponderEliminardebe ser la magia del lugar unidas
a tus palabras.
muy interesante.