A diario me pregunto
como sobrellevar las inclemencias
de ese océano llamado vida
Unos días es un mar tranquilo
como cuando baña las costas suaves
Otros como el fondo abisal
entre colinas e islas volcánicas
Suelo nadar en ellos, evitando las rocas,
perdiendo energía al avanzar
Y curando cada herida
de dolor y desilusiones
Son la cicatrices de la supervivencia
Lapislazuli
Todos nadamos en ese mismo océano.
ResponderEliminarUn beso dulce.
Así es la vida, existe de todo y hay que hacer frente a las inclemencias de la vida con valor y paciencia.
ResponderEliminarUn beso grande.
Hola Lapislazuli , ya lo puedes tu decir la vida es como un mar , que unas veces esta bravo y otras en cambio esta en calma total , y nosotros lo pobres marineros tenemos que navegar con nuestro pequeño barco , para que el mar no lo destroce y lo haga añicos , así es como comparo mi vida ahora mismo te podría decir que después de un tiempo de un mes y medio , por fin vuelvo a salir a navegar por ese mar que es la vida ¿ Hasta cuando ? pues no lo se , seguramente hasta que la próxima tormenta acabe de romper definitivamente mi pequeño velero , esperemos que no sea así , sabes me gusto esta comparación , espero que tú este bien amia mía , te deseo una feliz mañana , y como sabes siempre me es muy grato pasar por tu bello rincón a saber de ti , y de lo que aquí escribes , besitos preciosa de tu amiga Flor.
ResponderEliminarEsas cicatrices, las que no se pueden evitar, pero que con el tiempo se logran sanar.
ResponderEliminarBesos.
No hay que perder la energía a pesar de las desilusiones, que son solo nuestro mal percibir de quienes nos rodean, si los viéramos con los ojos de la realidad no nos desilusionarían, solo los querríamos tal cual son, un abrazo Lapislázuli!
ResponderEliminarQue bien has descrito la vida, los días como las olas unos días calmados y otros bravíos pero siempre hay que nadar y algunas veces a contracorriente.
ResponderEliminarMe han encantado tus letras.
Besos.
Lunna.
Siempre es complicado navegar en el océano de la vida y hay que remar intentando no ir a contracorriente.
ResponderEliminarBesos.
Lunna.
Ese océano tan de todos...pobre el que no bracee en él.
ResponderEliminarFeliz tarde Lapiszule.
Un abrazo